27 Nov Drogas y rehabilitación
Popeye es un nombre que evoca cariño y cuidado por lo que nos importa.Y eso se refleja en lo que ha sido la relación con la Corporación La Esperanza.
La Esperanza es una institución que desde hace 29 años trabaja en un tema duro y complejo como lo es la droga. Nuestro objetivo es prevenir su consumo, dar oportunidades de rehabilitación a personas de escasos recursos con dependencia severa e influir en políticas públicas para enfrentar el problema. En los últimos años, hemos querido visibilizar también al eslabón más débil en esta cadena: el recién nacido que ha sido expuesto a la sustancia durante su gestación. Tratarlo a tiempo y rehabilitar a su mamá es el desafío de nuestro programa “Naciste Tú”, para que juntos tengan una oportunidad de desarrollarse lejos de la droga.
Es un mundo asociado a mucho dolor y desesperanza, que se ilumina ante la posibilidad de recomenzar y de recuperar lo perdido , en un contexto en que La Esperanza promueve un enfoque profundamente humano, dignificante e integral. En este proceso tan potente, es que desde hace 15 años Popeye ha sido uno de nuestros socios y aportantes. Como pocos, supo entender lo importante que es para Chile y para cada una de estas personas el tener una oportunidad de cambiar su futuro. También comprendió a tantas mamás que quieren proteger a sus hijos de los riesgos asociados a este flagelo, promoviendo la prevención, y se sumó al desafío de trabajar por un país que no esté intervenido por la droga, donde los niños y jóvenes junto a sus familias puedan soñar y desarrollar sus proyectos, sin miedo.
Un abrazo grande desde todos quienes se rehabilitan y trabajan en La Esperanza.
Por: Ana Luisa Jouanne, directora Corporación La Esperanza