24 Ago 7 claves para evitar que un bebé sea obeso
Los cambios de los lactantes son de gran magnitud y velocidad. Es por ello que se realiza supervisión del crecimiento y desarrollo a través de los controles de salud infantil, que incluye evaluación nutricional, prevención de situaciones de riesgo nutricional, tanto por déficit o exceso y prevención de futuras enfermedades crónicas del adulto, según explica la enfermera Teresa Cuevas, académica de la UNAB.
El peso como parámetro aislado no tiene validez y debe expresarse en función de la edad o de la talla. La medición del peso y talla para la edad, y el peso para la talla, constituyen los parámetros más fieles para evaluar crecimiento y estado nutritivo en un niño. “Existen factores condicionantes de riesgo de malnutrición por exceso, ya sea sobrepeso u obesidad. Por ejemplo, madre y/o padre obeso, lactancia materna exclusiva inferior a 4 meses, recién nacido pequeño para la edad gestacional o macrosómicos (peso mayor o igual a 4 kg al nacimiento), antecedentes de diabetes gestacional en ese embarazo, diabetes tipo II en padres y/o abuelos. También se han identificado factores de riesgo social asociados al sobrepeso u obesidad. Por ejemplo: hijo único, primer hijo, padre y/o madre ausente, madre que trabaja fuera del hogar, baja escolaridad materna, enfermedad psiquiátrica de la madre y otros”, subraya.
Ponga atención
Según las guías alimentarias y normas de alimentación del niño menor de 2 años (MINSAL) se debe considerar lo siguiente:
1-Los niños alimentados con lactancia materna exclusiva presentan inicialmente un crecimiento mayor que los niños alimentados con fórmula. Después de los 4 a 6 meses se produce un freno fisiológico en la velocidad de crecimiento.
2-Existen lactantes con conducta alimentaria voraz. En esos casos se recomienda insistir en organizar horarios de lactancia materna y evitar los excesos innecesarios. Se recomienda una frecuencia cada tres a cuatro horas, con una duración de 20 minutos cada vez.
3-Los padres deben aprender a identificar que la señal de llanto en el lactante no siempre se traduce en hambre. Puede indicar necesidad de apego, sensación de frío o calor, necesidad de muda, cólicos, flatulencia, sueño u otras causas.
4-Vigilar especialmente la introducción de sólidos, insistiendo en el uso de preparados de densidad energética y porciones adecuadas.
5-Para los niños alimentados con lactancia materna exclusiva durante los primeros 6 meses, corresponde a esta edad incorporar su primera comida: el almuerzo. A los 8 meses hay que incorporar la segunda comida: la cena.
6-Incorporación gradual de alimentos de diferentes tipos para ampliar la gama de colores, sabores, olores, textura y consistencia.
7- Preparación de los alimentos sin adición de sal, azúcar, ni saborizantes salados o dulces.