25 Jun 5 sugerencias para una piel sana
¿No tienes tiempo para el cuidado intensivo de la piel? Todavía puedes mimarte siguiendo los conceptos básicos. Un buen cuidado y las opciones de estilo de vida saludable pueden ayudar a retrasar el proceso de envejecimiento natural y prevenir diversos problemas. Comienza con estos cinco consejos.
Protege tu piel del sol
Una de las formas más importantes para cuidar la piel es protegerla del sol. Una vida de exposición al sol puede provocar arrugas, manchas seniles y otros problemas, así como un aumento del riesgo de cáncer. Para obtener la protección solar más completa:
- Utiliza un protector solar de amplio espectro que tenga un factor de protección solar de, al menos, 15. Colócate abundante cantidad de protector solar y vuelve a aplicarlo cada dos horas, o con más frecuencia si estás nadando o transpirando.
- Busca lugares con sombra. Evita el sol entre las 10.00 y las 16.00 hrs, cuando los rayos solares son más intensos.
- Usa ropa de protección. Protégete con prendas de tejidos ajustados y mangas largas, pantalones largos y sombreros de ala ancha. También ten en cuenta prendas especiales para protegerte del sol, que están especialmente diseñadas para bloquear los rayos ultravioletas.
No fumes
Fumar le da a tu piel un aspecto avejentado y contribuye a la formación de arrugas. Fumar estrecha los pequeños vasos sanguíneos que se encuentran en las capas más superficiales, lo que disminuye el flujo sanguíneo. Esto elimina el oxígeno y los nutrientes que son importantes para la buena salud de la piel.
Fumar también daña el colágeno y la elastina, las fibras que le aportan fortaleza y elasticidad. Además, las expresiones faciales reiteradas que haces cuando fumas, por ejemplo, fruncir los labios al inhalar y entrecerrar los ojos para exhalar el humo, pueden contribuir a la formación de arrugas.
Si fumas, dejar de hacerlo es la mejor manera de proteger la piel. Pídele a tu médico consejos o tratamientos que te ayuden a dejar de fumar.
Trata tu piel con suavidad
La limpieza y el afeitado diarios pueden perjudicar tu piel. Para tratarla con suavidad:
- Limita la duración del baño. El agua caliente y las duchas o baños prolongados eliminan los aceites naturales. Limita la duración del baño o de la ducha y usa agua tibia en lugar de agua caliente.
- Evita los jabones fuertes. Los jabones y detergentes fuertes pueden eliminar los aceites naturales de la piel. En su lugar, usa productos suaves o hipoalergénicos.
- Para proteger y lubricar la piel, aplica crema, loción o gel de afeitar antes de afeitarte. Para una afeitada más al ras, usa una afeitadora limpia y afilada. Aféitate en la dirección en que crece el pelo, no a contrapelo.
- Después de lavarte o bañarte, sécate suavemente con una toalla dando pequeños toques para que quede algo de humedad en la piel.
- Si tienes piel seca, usa un humectante que se adapte a tu tipo de piel. Para el uso diario, considera un humectante que contenga factor de protección solar.
Lleva una dieta saludable
Una dieta saludable puede ayudarte a que te veas y sientas de la mejor manera posible. Come frutas, vegetales, cereales integrales y proteínas magras en cantidades abundantes. La conexión entre la dieta y el acné no es clara; sin embargo, de acuerdo con algunas investigaciones, una dieta con alto contenido de vitamina C y bajo contenido de grasas no saludables y de hidratos de carbono procesados o refinados podría promover una piel con un aspecto más juvenil.
Controla el estrés
El estrés no controlado puede hacer que la piel se vuelva más sensible y provocar brotes de acné y otros problemas de la piel. Para fomentar una piel sana —y un estado de ánimo saludable—, toma medidas para controlar el estrés. Establece límites razonables, acorta tu lista de tareas pendientes y tómate el tiempo para hacer las cosas que disfrutas. Los resultados pueden ser más notorios de lo que esperas.
Fuente: Clínica Mayo.