Cómo lavar las almohadas de tu cama
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Cómo lavar las almohadas de tu cama

El lavado de almohadas es muy importante

Cómo lavar las almohadas de tu cama

Tres mil horas. Eso es aproximadamente el tiempo que se supone debemos pasar en la cama cada año. Por eso es especialmente importante que tu espacio para dormir sea lo más tranquilo, cómodo y limpio posible. Las almohadas son un refugio para gérmenes, bacterias, polvo, suciedad y todo tipo de alérgenos. Mantenlas limpias y obtén un sueño más reparador con estos consejos.

Airear

Las almohadas son un lugar privilegiado para que se asiente el polvo, la suciedad y otros alérgenos. Para evitar la acumulación, desempolva las almohadas y sacúdelas enérgicamente con frecuencia. Lo mejor es que esto sea parte de tu rutina de limpieza semanal o quincenal cada vez que cambies las sábanas y las fundas de las almohadas. Esto ayuda a que las almohadas conserven su forma, evita lavados innecesarios y las mantiene más limpias entre lavados.

Limpieza de manchas según sea necesario

La limpieza de manchas se debe realizar regularmente para todas las almohadas del hogar, incluidos todos los cojines de camas o sofás. Las almohadas tienden a absorber varias manchas: saliva, sudor, grasitud del pelo, derrames de líquidos y otras manchas pueden filtrarse en la parte interior de tus amados y esponjosos reposacabezas. Siempre que derrames algo o notes una mancha, trátala de inmediato para que pueda eliminarse rápida y fácilmente. Frota las manchas húmedas con un paño limpio y seco y elimina todas las partículas sólidas, si las hubiera.

Lavado en máquina

Antes de lavar las almohadas en la lavadora debes verificar siempre las instrucciones en su etiqueta. La mayoría de las almohadas rellenas de espuma y sintéticas se pueden lavar a máquina, pero no debes mezclarlas con ninguna otra ropa o ropa de cama. Recomendamos no lavar más de 2 o 3 a la vez, según la capacidad de la lavadora. El tambor solo debe estar ⅔ lleno para asegurarse de que haya espacio para que la carga se agite y gire.

Secar a fondo

Antes de poner la almohada a la secadora, lee la etiqueta de cuidados para ver qué método de secado sugiere el fabricante. La mayoría de las almohadas se pueden secar en la secadora a temperatura media o baja. Elimina el exceso de humedad envolviendo la almohada en una toalla grande y presionando suavemente hacia abajo. Sugerimos secar no más de 2 almohadas a la vez.

Si hace buen tiempo, también puedes colgar almohadas en un tendedero en un lugar cálido o al sol. Asegúrate de voltear la almohada cada hora para que cada lado, así como el relleno, puedan secarse por completo.

Un último consejo para que tus almohadas duren más

Cambiar las fundas de almohada regularmente reducirá la frecuencia con que las almohadas deben limpiarse por completo. Recomendamos poner un nuevo juego de fundas de almohada al menos una vez por semana. Esto evitará la acumulación de sudor, aceites corporales, células de la piel, evitando que se filtren al interior de la almohada.

Fuente: Laundrycare.biz