Cómo lavar mochilas
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Cómo lavar mochilas

Es bueno lavar las mochilas

Cómo lavar mochilas

Seguramente te ha pasado que la mochila de tu hijo o hija sufre los embates de marzo, a pesar de estar recién estrenada. Otras familias optan por reutilizar las mochilas del año pasado.

En ambos casos, y dependiendo del color de la mochila, muchas veces es necesario lavar este tipo de bolsos para que no se arruine su apariencia.

¿Cómo hacerlo? Pon atención a estos consejos.

Etiqueta

Antes de comenzar a limpiar una mochila, revisa la etiqueta para ver si es apta para lavar a máquina o si necesita una limpieza localizada.

Lavado en lavadora

  • Si tienes una mochila lavable a máquina el lavado es fácil, pero la preparación es crucial. Asegúrate de que la mochila esté completamente vacía, prestando especial atención no solo a los bolsillos sino también a las esquinas interiores (donde suelen terminar los envoltorios de dulces, la suciedad, las monedas y pequeños papelitos).
  • Si tu mochila tiene algún tipo de marco debes quitarlo para proteger el tambor de la lavadora.
  • Usa una pequeña cantidad de detergente y agua fría.
  • Deja que la mochila se seque al aire, boca abajo, para que drene el agua residual en los bolsillos o compartimentos.

Lavado a mano

  • Si está lavando una mochila a mano, de todos modos asegúrate de que está completamente vacía antes de comenzar.
  • Si la mochila se puede sumergir, puedes lavarla en agua tibia en un recipiente plástico, fregadero o bañera. Puedes usar un jabón para lavar ropa o detergente para lavado a mano.
  • Usa una esponja o un cepillo suave para limpiar la mochila antes de enjuagar con agua fría.

No se puede mojar

  • Si no puedes sumergir la mochila en agua, puedes usar un paño húmedo con un poco de jabón para limpiar las manchas.
  • Concéntrate en las áreas más sucias, pero frota bien toda la superficie para que te quede una mochila bonita y limpia.

Las mochilas son un artículo práctico y es probable que se ensucien, pero si las cuidas bien durarán más y requerirán menos atención. Una revisión periódica de su interior y exterior es una excelente manera de mantener a raya el desorden y el peso innecesario.

Fuente: Laundrapp.com