15 May Cuidado de las manos en época de pandemia
En el contexto de pandemia actual, el lavado de manos es una herramienta vital para impedir la propagación del virus. Por ello, es necesario lavarse las manos con agua y jabón muchas veces durante el día. Lamentablemente, lavarlas constantemente puede dañar la piel.
“Nuestra piel cumple una función protectora, evitando la salida de sustancias beneficiosas como el agua y actuando como una verdadera barrera frente a agentes externos nocivos que pueden causarnos daño. Esto es posible gracias a que la piel cuenta con un manto hidrolipídico protector en la cara más externa, formado gracias al sebo y sudor que secreta el cuerpo”, detalla Lorena Baeza, académica de la Escuela de Química y Farmacia de la U. Andrés Bello.
Jabón… más crema
Según la experta, “el agua y el jabón son capaces de solubilizar y eliminar no solo la suciedad, sino también la grasa natural y necesaria que cubre nuestra piel, sacando el manto protector y dejando la piel expuesta y desprovista del factor natural hidratante y sus secreciones naturales protectoras”.
Por ello se hace necesario, junto con el lavado de manos, la aplicación de cremas que restablezcan el manto protector en la superficie de la piel. “Se recomiendan productos compuestos por sustancias grasas y emolientes, tales como la lanolina, para brindar un film protector sobre la superficie y con activos cosméticos curativos, como la alantoína, que activaran el crecimiento celular y calmaran la piel dañada”, subraya.
Pieles secas
La académica destaca que se debe tener especial atención con las personas que tienen la piel seca, “debido a que al descamarse de forma irregular suele dejar ‘surcos o entradas’ a capas más internas de la piel y con esto da paso fácil a agentes irritantes, teniendo una respuesta de dolor e irritación a ciertas sustancias de forma mucho más rápida que las personas con piel más grasa, que sí cuentan con una capa protectora en su exterior”.
La profesional recalca que la piel de nuestras manos es la más expuesta junto con la del rostro. Por lo que siempre debemos cuidarla lavando bien nuestras manos para evitar que queden restos de jabón, detergente o cualquier sustancia irritante presente en los productos de limpieza que utilizamos a diario dentro o fuera de nuestro hogar.