04 Ago 3 errores típicos al usar la secadora de ropa
Durante el invierno, o si tenemos que lavar kilos y kilos de ropa y tenemos poco espacio en casa, la secadora se vuelve una de nuestras mayores aliadas en el proceso de lavado.
Sin embargo, a veces cometemos errores que pueden perjudicar nuestra ropa y la máquina. En vista de esto, el product manager de Home Appliances de Midea Carrier Chile, Herman Abarca, destaca los tres errores más comunes al usar estos equipos.
1-Sobrecargar la secadora
No pongas más ropa de la que indica tu secadora, ya que este es uno de los principales errores que no solo puede acortar la vida útil de tu equipo, sino que afecta la eficacia del secado. Es esencial entender la capacidad de secado máxima indicada por el fabricante y respetarla. “La carga se mide siempre en ropa seca”, destaca Abarca.
2-No revisar la etiqueta de la ropa
Otro error común es no revisar las etiquetas de la ropa antes de secarla. Las secadoras modernas ofrecen programas específicos para diferentes tipos de tejidos, como algodón, sintéticos y mixtos. “Cargar la secadora con prendas no recomendadas puede dañar la ropa que buscamos secar. La separación de la ropa por tipo de tejido es recomendada para evitar daños, encogimiento o pérdida de estampados”, explica el experto.
3-No limpiar la secadora
Se recomienda limpiar los tubos de extracción de aire, los tanques de agua y los filtros con un paño húmedo al menos una vez al mes para evitar acumulación de residuos. “No limpiar la secadora en forma periódica puede provocar que la ropa quede con mal olor”, añade el ejecutivo de Midea Carrier Chile.
Condensación y bomba de calor
Además de estos errores comunes, Abarca destaca que muchas personas no conocen las diferencias entre las tecnologías de condensación y de bomba de calor en las secadoras: “Es importante informarse y comprender las características de cada una antes de tomar una decisión de compra”, afirma.
La secadora con bomba de calor, una de las últimas tecnologías, no calienta el aire varias veces, por ende, se puede catalogar como un producto con ahorro energético. Además, debido al depósito que lleva integrado, esta se puede instalar en cualquier parte, ya que no requiere un ducto para expulsar el agua.
La secadora por condensación convierte el calor en vapor de agua a través de una resistencia eléctrica. Cuando se enfría, se recoge en un depósito que hay que vaciar periódicamente, aunque también, según su ubicación, se puede conectar el depósito con un desagüe para que se vacíe automáticamente.
Por: Midea Chile
