24 Sep Época de calor: ¡consejos para el recambio de clóset!
Ya estamos disfrutando de la primavera en los últimos meses del año. Ello trae de la mano varios cambios en tu hogar: pasamos más tiempo fuera en patios o terrazas, abrimos las ventanas de tope a tope, se iluminan los espacios interiores con la luz solar y debemos hacer un “refresh” a nuestro clóset pensando en la época de calor.
Ya sea que guardes la ropa de invierno en otro espacio o simplemente la lleves hacia atrás del clóset, tenemos que pensar en darle protagonismo a poleras, sweaters delgados, vestidos y uno que otro pantalón corto (nunca se sabe lo calurosa que puede estar la primavera). La lana, el polar, la franela y el cotelé pasan a segundo lugar hasta la próxima temporada.
Desde Popeye te entregamos los siguientes consejos que pueden ayudarte a ordenar tu clóset para la nueva temporada primavera-verano. ¡Toma nota!
Antes de guardar
- Revisa las prendas invernales para ver si tienen alguna mancha. Si encuentras alguna, este es el momento de sacarla con ayuda de jabón Popeye.
- No guardes ropa de invierno sucia. Debe estar siempre lavada, procurando secar muy bien para evitar que aparezca olor a humedad.
- En el caso de la ropa de bebé, o de personas con piel delicada, utiliza un detergente hipoalergénico como Popeye Bebé o Popeye Familia.
- Dosifica muy bien el detergente para que no queden restos en las telas… hasta la siguiente temporada.
- En el caso de la ropa que no vayas a lavar porque está limpia, revisa los bolsillos para evitar que queden monedas, pañuelos desechables, boletas, pinches o cualquier otro objeto.
- Desecha aquella ropa en mal estado: solo ocupará espacio y es probable que el próximo otoño-invierno ya no quieras usarla.
Buena organización
- Si guardas la ropa de invierno fuera del clóset, puedes utilizar cajas plásticas o las repisas de un clóset secundario que tengas en casa.
- Si optas por cajas plásticas (aíslan la humedad y los bichos) existen varias opciones en el mercado: grandes, medianas, planas para poner bajo la cama o con ruedas para el fácil desplazamiento.
- Si optas por las repisas de un clóset secundario, limpia muy bien el espacio antes de poner la ropa. Una buena idea es usar bolsitas de olores y productos antihumedad.
- Organiza la ropa de invierno por alguna categoría que te acomode: prendas de la parte superior o inferior, chaquetas, solo sweaters, solo pantalones, solo camisetas, etc. Procura guardar los tejidos delicados, como la lana o cachemira, en forma separada.
- Aunque es importante optimizar el espacio la idea no es dañar la ropa. Por ello, no apiles en exceso una prenda sobre otra solo para que te quepa todo en un espacio minúsculo. Trata de dejar cierto margen de “respiración”. El papel de seda puede ayudar a evitar arrugas en prendas muy delicadas.
Lugar adecuado
- La ropa almacenada debe quedar en un lugar con una temperatura adecuada. Evita espacios húmedos, mojados, muy calurosos o donde le pueda llegar sol directo a las prendas.
- Si decides guardar en bodega, asegúrate de limpiarla bien para evitar que aparezcan bichos indeseables o exceso de polvo.
- Si guardas las cajas en una logia semi-cerrada, procura que el espacio elegido no se llueva o que no se moje por riego u otra razón.